Para todos aquellos aficionados a la fiesta nacional, os informo que, el otro día, decidí salir al campo, donde debe ser, para demostrar mi vergüenza torera, para escarnio de esas "figuritas" del toreo actual que no lidian más que muñequitos.
Conociendo perfectamente la finca donde se hallan los astados más fieros y peligrosos del mundo, me dispuse a exhibir mi arte sin igual.
En la primera fotografía, podéis apreciar perfectamente cómo piso terrenos imposibles para cualquier otro torero, mostrando mi tripa al "colorao" con cara de pocos amigos, al tiempo que le citaba con un muy torero," "ehe, toro", invitándole a que se arrancara con mi cuerpo prácticamente pegado a su enorme cornamenta. Mi resolución, debió convencerle para que no lo hiciera, volviendo la cabeza hacia otro lado un instante después, en un gesto de reconocimiento a mi torería.
En la segunda fotografía, quise tentar al novillo, en las mismas barbas de su brava madre. Ella me miró con cara de pocos amigos pero, ante la evidencia de mi valentía sin igual, humilló y se tumbó para vergüenza propia.
En la tercera fotografía, en un alarde al que no se atrevería ni el mismísimo José Tomás, me arrodillé y cité a portagayola a estos dos morlacos asesinos al unísono. Dada mi resolución, decidieron declinar la invitación.
Una vez reafirmada mi autoestima torera y mi valentía sin parangón, procedí a continuar mi paseo.
Mi perro, mi mejor amigo, que me acompañaba y que mantiene cierta prevención con estos animales, respiró aliviado y me dijo: "¡Estás como una cabra, Jota Ele!"
Conociendo perfectamente la finca donde se hallan los astados más fieros y peligrosos del mundo, me dispuse a exhibir mi arte sin igual.
En la primera fotografía, podéis apreciar perfectamente cómo piso terrenos imposibles para cualquier otro torero, mostrando mi tripa al "colorao" con cara de pocos amigos, al tiempo que le citaba con un muy torero," "ehe, toro", invitándole a que se arrancara con mi cuerpo prácticamente pegado a su enorme cornamenta. Mi resolución, debió convencerle para que no lo hiciera, volviendo la cabeza hacia otro lado un instante después, en un gesto de reconocimiento a mi torería.
En la segunda fotografía, quise tentar al novillo, en las mismas barbas de su brava madre. Ella me miró con cara de pocos amigos pero, ante la evidencia de mi valentía sin igual, humilló y se tumbó para vergüenza propia.
En la tercera fotografía, en un alarde al que no se atrevería ni el mismísimo José Tomás, me arrodillé y cité a portagayola a estos dos morlacos asesinos al unísono. Dada mi resolución, decidieron declinar la invitación.
Una vez reafirmada mi autoestima torera y mi valentía sin parangón, procedí a continuar mi paseo.
Mi perro, mi mejor amigo, que me acompañaba y que mantiene cierta prevención con estos animales, respiró aliviado y me dijo: "¡Estás como una cabra, Jota Ele!"
12 comentarios:
Antes de leer tu comentario , te dire a primera vista lo que me parecen las fotos.
La primera es un retrato precioso, dan ganas de tocar el pelo del animal,Pero te mira con una cara sospechosa jejejeje.
la segunda, el color y la distribucion de los elementos, muy buena.Pero cuidadin que el animal te sigue mirando.
La tercera es el colmo. Bonito contraste de color entre los dos animales y me gusta mucho el marco que formas con los dos arboles a los lados, una obra genial.
No se que pensar de esas miradas, jejejeje.
Termino de leer y me parto de risa con tus esplicaciones, bonita historia de valor.
Besos.
¡¡Vaya torero que estás hecho!!
Haz caso a O'Co y sal pitando de ahí...
Besitos!
Pa verte Maestro! Pa verte.
Leyendo tus palabras, viendo las fotos y cerrando los ojos para conseguir una mejor visión de la situación, me viene a la mente las imágenes de "Búfalo", ese peculiar limpiabotas magistralmente interpretado por Jesús Álvarez en la serie Juncal, a quien el inolvidable Paco rabal y daba vida...
Un abrazo amigo
Nada, que soy un incomprendido.
Me juego la vida, aporto las pruebas gráficas y lo único que se te ocurre decirme es que te partes de risa.
En fin, lo que digo. ¡cuánta incomprensión hay por el mundo!
¡Ja, ja, ja, ja!
Besos.
Pues, sí señora. Menos cachondeíto y más seriedad.
Creo que ha quedado suficientemente mi arte y mi valentía torera.
Pues sí que... ¡Vaya día que llevo!
¡Ja, ja, ja, ja!
No, si pitando salimos. O'Co obligaba a ello.
Gracias por pasar, Maite.
Besos.
Sí, Jan. Te lo puedes imaginar. Pa verme.
¡Cómo no me voy a acordar de "Juncal". Era una serie formidable y, tanto Paco Rabal como Jesús Álvarez "El Brujo", bordaban sus respectivos papeles. Por cierto que, muy lejos de la visión que se tiene de él, supongo que sabrás que Jesús Álvarez, además de un actor sobresaliente, es un intelectual de gran altura.
Otro abrazo para ti.
Vamos, que me acabo de acojonar!!! ja ja ja.
Sobretodo con el segundo morlaco, que tiene pinta de llamarse "asesino" ja ja ja
Un abrazao
¡Vaya, menos mal que hay alguien que me comprende!
¡Ja, ja, ja, ja!
Gracias por el comentario, Dani.
Un abrazo
muuuu, muuuu,...mu buenas fotos, en tu proxima entrada esperamos a jota vestido con el traje de luces-...saludos.
¡Ja, ja, ja, ja!
Puedes ver que en la última entrada, no llevo el traje de luces, Toni.
Gracias por tu visita y tu comentario. Me alegro que te hayan gustado estas fotos.
Saludos.
Yo te dejo los morlacos y me dedicaré a otras cosas mas seguras, mira que tienes valor, JOta Ele, tienes que cuidarte que ya no estás para salir trotando a toda pastilla caso de que te hubieran hecho solamentge el ademán de venir a saludarte.
Un saludo
¡Ja, ja, ja, ja!
Bueeeeeno. Diré la verdad.
Eran más amigables de lo que he relatado.
Pero, de vez en cuando, hay que exagerar un poquillo.
Un saludo, joan.
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